LA PAGINA DE ENRIQUE LUIS : RELATO DE VIAJE A ETIOPIA 
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octubre 2018

lago Tana. bahirDar


A la hora de plantear nuestro viaje a Etiopía nos planteamos la disyuntiva de si incluir todo el país o limitar nuestra ruta solo a la zona norte. Finalmente nos inclinamos por esta opción ya que todos los comentarios indicaban que las visitas a las tribus de la zona sur estaban enfocadas para el turismo y adolecían de una gran falta de autenticidad.

Encontramos unos vuelos realmente baratos con Ethiopian (325 € por cabeza, que subieron a 550€, ya que decidimos incluir un salto a Zanzibar para descansar de las 2 semanas que pasaríamos recorriendo Etiopía). Eso sí, cambios de horarios y rutas nos hicieron varios desde la fecha de emisión hasta la de partida .

Elaboramos la ruta y sacamos los vuelos internos (al volar con Ethiopian, salen entre un 60%-70% menos del precio habitual en su web: 4 vuelos por 160€)), el seguro y reservamos los hoteles. Decidimos no llevar mucho efectivo y nos sacamos unas tarjetas de Bnext que no cobran comisiones por sacar dinero y pagar en el extranjero. ATMs encontramos en todas los ciudades de nuestra ruta y excepto un par de problemas por falta de conexión siempre funcionaron adecuadamente.

Aunque los mosquitos transmisores de la malaria no existen a una altitud superior a los 2.000 metros, y, por ello, no se encuentran en la mayor parte de los puntos de nuestra ruta, nuestra primera parada, Bahir Dar, se encuentra a 1800 metros y a orillas de un gran lago. Por ello, tras comprobar que tenemos el resto de vacunas recomendadas al día, iniciamos el tratamiento la semana antes de la partida.

Días antes de la partida Ethiopian suele ofrecer una “puja” para acceder a bussines. Como el vuelo es nocturno decidimos pujar y hacemos el upgrade por 350€. Nos trasladamos a Madrid, saliendo el vuelo en hora.
A la llegada mostramos nuestros visados sacados por la web de Ethiopian, sacamos dinero de nuestro primer ATM (solo permiten un máximo de 4000 birs, 125€) , nos enteramos que la SIM local que habíamos pensado comprar solo se puede adquirir en las oficinas de ETelecom y marchamos a la terminal local del aeropuerto de Addis (pésimas indicaciones para acceder a ella), donde coincidimos con el padre Angel, de Mensajeros por la Paz.

Un buen rato de espera y embarcamos para un breve vuelo a Bahir Dar, la principal ciudad a orillas del lago Tana y la opción más apropiada para conocer los monasterios del lago y las cataratas del Nilo Azul .

A la llegada nos espera el transporte gratuito del hotel Delano. Vemos todavía anuncios del reciente año nuevo etiope, "Enkutatash" en amárico (el 11 de septiembre). En el trayecto intentan vendernos las posibles excursiones. Conocidos los precios decidimos ver de gestionarlas por nuestra cuenta.

Habíamos quedado con el representante de "EtioTravel" para pagarle el transfer entre Aksum y Mekele y la excursión al Danakil y Erta Ale que habíamos reservado con ellos a través de su web por 560 €. Concretamos las horas y lugares de recogida, tras lo cual tomamos un tuctuc para ir a la zona de la iglesia de S. Jorge y dar un paseo por sus alrededores.
Al lado de la iglesia se encuentra el embarcadero de donde parten las excursiones del lago. Para visitar los famosos monasterios de Narga Selassie y Daga Istifanos hace falta tomar la excursión de día completo, así que nos inclinamos por hacer solo las islas mas cercanas .
En una de las agencias acordamos hacer a la mañana siguiente una ruta matinal por el lago y el traslado a las cataratas a la tarde por 1400Birs.(unos 22 € por cabeza)
Volvemos paseando por el abigarrado Giorgis road, con una parada en el Restaurante Azewa para tomar unas cervezonas a 70 céntimos de euro al cambio.
La cena la hacemos en el hotel a base de pizza y firfir. Probamos por primera vez la injera, base de cualquier comida etíope, hecha de harina fermentada de un cereal llamado tef. No nos gusta mucho: demasiado agria.

A las 8 nos vamos andando hasta el muelle. Como para embarcar hay que esperar al resto del pasaje (un grupo mixto de turistas y etíopes) nos da tiempo a acercarnos a la parada de taxis de la iglesia de S Jorge, donde negociamos uno por 1700ETB para trasladarnos al día siguiente a Gondar. (en otros lugares nos pedían entre 2000 y 2200 ETB)

El lago Tana es el mayor de Etiopía, con 3000km2 y una profundidad de hasta 14 metros, con el río Abbay como única salida. En sus numerosas islas se encuentran bellos monasterios. Embarcamos y hacemos una lenta travesía hasta llegar a Mehal Zege. Un breve paseo hasta arribar al monasterio de Betremaryan. Como vemos que a los etíopes les cobran 100b y a nosotros nos quieren cobrar 150, nos plantamos y ningún extranjero entra en la iglesia.

Volvemos al puerto para ir al cercano monasterio de Ura Kidanemiret, del siglo XIV, el más interesante artísticamente. El interior se encuentra completamente decorado, repleto de pinturas de escenas bíblicas. Dedicamos un buen rato a recorrerlo y disfrutarlo, aunque el museo, donde se exponen los manuscritos de la biblioteca monacal, se encuentra cerrado.


cataratas Nilo Azul


Insistimos en ir al monasterio de kibran Gabriel, de los mas antiguos del lago, pero nos dicen que está cerrado (una trola como una catedral) y nos llevan en su lugar al de Entonis Eyesus, que no tiene el mas mínimo interés. Nosotros no entramos.Uno de los pasajeros monta una bronca tremenda por que exige la devolución de su entrada al sentirse timado.

Aunque es tarde (el barco es lentísimo) nos llevan a la salida del Abbay y pretenden vendérnosla como “las fuentes del Nilo Azul”, cuando éstas según hemos leído se encuentran al sur del lago.
Nos dejan en el embarcadero, ante las protestas de los etíopes, por no haber ido a algunos monasterios previstos y nos llevan a un super a comprar algo para comer y acto seguido subirnos a una furgoneta para ir a las cataratas de Tiss Abay, (agua humeante) a unos 32 km, casi 1 hora de camino, en el pueblo de Tissisat.

Pagamos la entrada del parque nacional (50 birr). Como ya es tarde y se nos va a echar la noche encima, en vez de hacer el camino largo de una hora de duración que desciende a la garganta hasta el Puente de los Portugueses (del siglo XVII) desde donde empieza la subida hasta el puente colgante que acaba en el mirador de las cataratas, hacemos el camino corto: en sentido contrario a este camino hay un bote que atraviesa el rio cerca de la presa y que por 20 ETB por trayecto, en un par de minutos nos traslada a la otra orilla para, después de unos 10 minutos de caminata alcanzar las cataratas del Nilo Azul , las cuales alcanzan los 400 metros de anchura y los 45 metros de altura y que en esta época del año están muy caudalosas.
Un buen rato de fotos hasta iniciar el regreso para volver a la furgoneta y llegar ya de noche a Bahir.

Nos dejan en nuestro hotel. Como es tarde y tiene pinta de que va a llover hacemos la cena en el mismo hotel a base de kitfo (carne picada de vaca casi cruda aderezada con una especie de pimentón picante mezclado con otros condimentos).

Desayunamos y cuando llega nuestro taxi iniciamos el camino para hacer los 175 kms que nos separan de Gondar.
Atravesamos el puente del Abbay, donde dicen que se suelen ver hipopótamos, pero nosotros no tenemos esa suerte. Hacemos una ruta muy agradable disfrutando de los bellos paisajes y del numeroso paisanaje (Este es un pais con mas de 100 millones de habitantes).

A la llegada vemos los preparativos para el Meskel, fiesta nacional que conmemora el descubrimiento de la verdadera cruz, que tiene lugar al día siguiente y la cual culmina prendiendo fuego a las cruces que se realizan en las calles y plazas con cañas y flores. Gondar fue capital imperial, entre los siglos XVII y XVIII y es conocida como la ciudad de las 44 iglesias, aunque su principal atracción es el recinto palaciego del Fasil Ghebbi. Fue declarada en 1979 Patrimonio de la Humanidad.

Dejamos las cosas en el hotel que hemos escogido por su ubicación, al lado de los castillos, aunque es muy básico (Con las celebraciones nocturnas del Meskel casi no podremos dormir) y salimos a dar un paseo por la zona de Piassa. Para el almuerzo marchamos a The Four Sisters, que es probablemente el mejor de Gondar con buena comida, lavado de manos con agua caliente, tostado de café….Tienen tanto carta como buffet de comida tradicional.

Repuestas las fuerzas vamos hacia el Recinto Real (200 birr,incluye entrada a los Baños de Fasilides) que como los otros recintos cierra al mediodia.
Este recinto amurallado comprende un área de 75000 m² con palacios y castillos restaurados gracias a la UNESCO, en el que destaca el castillo de Fasilides de 32 mts de altura y 4 torres situado frente a la entrada principal con una mezcla de estilos indio, árabe, portugués y aksumita.
Otros edificios son el archivo de Fasilides (donde una turista acababa de sufrir un accidente en el momento de nuestra visita), el palacio de Iyasu I, del que todavía se conserva la estructura principal en un magnifico estado, las dependencias palaciegas y los establos del emperador Bekaffa con el castillo de Mendewab, reina consorte de Bekaffa, al lado.

Tras el paseo marchamos a recorrer las calles cercanas donde diversos grupos de niños y jóvenes marchan lanzando gritos y proclamas religiosas en torno a las múltiples cruces .
Volvemos al hotel para descansar. Ya oscurecido se va la luz. Nos vemos obligados a salir a cenar con linternas (aunque cuando vuelve la luz la diferencia no es mucha) hasta el restaurante Master Chef.

Desde Gondar , aunque nosotros hemos preferido no hacerlo, se puede acceder en hora y media a la zona del Parque Nacional de las montañas Simien para realizar diversas caminatas y observar babuinos gelada, una especie que sólo vive en las Simien, y con suerte lobos etíopes o cabras walia.

Desayunamos en la terraza con vistas del lodge du chateau, dejamos pagada la habitación y concretamos el traslado al aeropuerto para el día siguiente (200ETB) antes de marchar andando (el tráfico esta cortado en los aledaños de la plaza del castillo, ya que en ella tienen lugar las celebraciones centrales del Meskel y se encuentra abarrotada de celebrantes y soldados) hacia la Piscina de Fasilides, una gran piscina rectangular con un pequeño edificio anexo de dos pisos, rodeados por un muro sobre el que han arraigado algunos árboles y que hoy día se utiliza casi exclusivamente para las ceremonias religiosas del Timkat (19 enero). En el camino hemos encontrado grupos de sacerdotes y feligreses vestidos de gala camino a la gran plaza para las celebraciones.

Es un lugar tranquilo en el que estamos solos y donde pasamos un buen rato antes de tomar un tuctuc (20b) hasta Kuskuam, otro recinto real, lugar de retiro de la emperatriz Mentewab, en lo alto de un pequeño cerro que está casi en ruinas y muy descuidado (prescindible). Marchamos andando cuesta abajo hasta que encontramos un tuctuc que nos lleva hasta donde los cortes de trafico le permiten en los aledaños del hotel.  


Meskel en Gondar


En el primer intento de visita a Debre Birhan Selassie la encontramos cerrada ya que todos los recintos cierran a mediodia (hasta las 19,30 hora etíope), así que nos vamos a almorzar a las cuatro hermanas para realizar la visita después de la comida.
La iglesia Debre Birhan Selassie es la única construida durante el imperio gondarino,(s. XVII), que sobrevivió entera a la destrucción de los derviches sudaneses. Su interés radica en las magníficas pinturas que hay en su interior, tanto en las paredes como especialmente en el techo, decorado con pinturas de caras de querubines, una de las estampas más reproducidas en postales y recuerdos. El recinto está rodeado por una muralla de piedra con doce torres redondas que representan a los doce apóstoles. La 13ª , la entrada principal, simboliza a Cristo. A la entrada a la iglesia coincidimos con el regreso de los celebrantes del Meskel que se reúnen en la explanada de la iglesia a bailar y cantar antes de despedirse.

Regresamos al hotel para pasar la tarde y salir a repetir la cena en las cuatro hermanas.

Desayunamos y nos trasladan al aeropuerto para un brevisimo vuelo a Lalibela en la región de Amhara.
A la llegada diversas furgonetas se reparten el traslado de los pasajeros (por 100ETB/cabeza) a los diversos hoteles del pueblo (a unos 2500 metros sobre el nivel del mar y a unos 15 kms del aeropuerto). Nosotros hemos elegido el Honey land por 72€ los 2 días.

Hace más de 700 años, cuando Jerusalén fue tomada por los musulmanes, el rey de Etiopía Gebre Mesqel Lalibela, ordenó crear una nueva Jerusalén. El resultado fueron once iglesias de piedra excavadas directamente en la roca,convirtiéndose en el punto de peregrinación más importante de Etiopía para los cristianos ortodoxos.
Nos dejan en el hotel, tomamos posesión de nuestra habitación y salimos a comer algo. En el camino ningún cajero del pueblo funciona y no nos dejan sacar dinero. En uno de los bancos nos invitan a pasar para hacer la operación dentro, sin comisión. Mentira, cuando los papeles están rellenos vemos que si están cobrando comisión y encima requieren el pasaporte (los cuales estan en el hotel). Por tanto, discusión hasta que finalmente nos dan el dinero al enseñar el carné de conducir. Nos tomamos unos sanwiches en el hotel seven olives y seguimos hasta la taquilla de las iglesias. Han subido el precio para los turistas hasta 50 dolares (entrada valida para 5 días). Los abonamos e iniciamos el recorrido.

Inicialmente el conjunto nos desilusiona: estructuras metálicas que cubren las construcciones afeándolas, indicaciones inexistentes, espacios cerrados …. Hacemos un primer recorrido por los complejos norte y sureste, dejando la iglesia mas conocida, Bete Giyorgis, para el dia siguiente.

Las once iglesias están repartidas en dos grupos, divididos por el río Yordanos. La mayor parte de las iglesias están unidas entre sí por medio de pasillos y pasadizos. Las once iglesias son diferentes unas de otras, estando cuatro de ellas totalmente separadas de la roca mientras el resto posee alguna unión a la roca de la que surgieron.
Hacemos el siguiente recorrido:

  • Bet Medhane Alem. (Casa del Salvador del mundo): Conectada con la de Bet Maryam por un pasadizo subterráneo. Sus 34 metros de largo por 25 de ancho y sus 30 pilares hacen de ella la más grande de todas. En esta están celebrando una misa.
  • Bet Maryam: Dedicada a la virgen, con un interior con frescos que embellecen las paredes. En los laterales del patio estan las de Bete Denagil (Casa de las Virgenes) y Bete Meskel (Casa de la Cruz)
  • Bet Golgotha -M Selasie: Tres estancias que comunican entre si, en donde se encuentra la tumba de Lalibela. Cerrada por restauración

    Andamos un poco hasta subir al complejo Sureste:

  • Bet Gabriel Raphael: Iglesia doble a la que se accede atravesando un foso por un puente de piedra que se encuentra sobre un foso. Cerca se encuentra la de Bethlehem (casa del Pan)
  • Bet Merkorios
  • Bet Emmanuel (Casa de San Manuel): En el centro de un patio excavado en la roca, pudo ser la capilla de los reyes y es la que está mejor esculpida.
  • Bet Aba Libanos (Casa de San Líbano): Se construyó dejando el suelo y el techo de la misma unidos a la roca madre. A esta no pudimos acceder ya que el “cura” estaba de siesta.


  • Gondar


    Salimos del recinto por donde podemos ya que no hay indicaciones, tomamos un tuctuc por 20ETB que nos devuelve al hotel, donde haremos una cena bastante sabrosa.
    Desayunados, comenzamos la caminata hasta entrar en el recinto monumental y pasear de nuevo por el complejo norte antes de ir a Bet Giyorgis (Iglesia de SanJorge), la más importante arquitectónicamente hablando que se encuentra apartada de los otros dos grupos monumentales. Es la iglesia mejor conservada de todo el complejo y la construcción más famosa de todas. Dedicada al patrón de Etiopía, se trata de una iglesia de 15 metros de alto y 12 metros de lado, esculpida en la roca con forma de cruz, a la que se accede a través de un pasillo descendente.

    Tras esta visita nos acercamos al mercado que se celebra los sábados, el cual se encuentra abarrotado. Un rato recorriéndolo antes de marchar al complejo sureste para una última visita. Esta vez salimos por el sitio adecuado y tras varios intentos tomamos un tuctuc que nos lleva al restaurante Ben Abeba, una curiosa construcción con terrazas suspendidas desde donde hay unas magnificas vistas de los valles de Werwer desde donde se pueden observar las circunvalaciones de los quebrantahuesos.
    Hacemos una comida normalita en la que tenemos que cambiar de sitio ya que empieza a llover copiosamente.
    La tarde la pasamos en el hotel viendo algún video hasta la hora de la cena, que hacemos nuevamente en su restaurante.

    Nuestra siguiente parada sera Aksum, al que nos trasladamos en otro vuelo de unos 40 minutos de duración. El hotel que hemos reservado tiene transporte gratuito desde el aeropuerto. Es el mas cutre del recorrido, con montones de mosquitos en la habitación y una cama durísima. Vamos a comer a Antica Special cultural (donde repetiremos para cenar)un plato de cordero y tibs (tiras de carne que se presentan en una especie de copa ancha con carbón encendido en su base). Buscamos un cajero y al tercer intento conseguimos extraer dinero. En el parque Ezama tomamos un tuctuc hasta el parque de las estelas. El conductor nos dice algo de taquillas pero no lo entendemos y nos deja en la misma puerta de acceso al recinto de las estelas. Las entradas las venden en una oficina turística que hay en la avenida de acceso. Como las estelas se observan perfectamente desde el exterior, pasamos de ir a por ellas. Hay varias decenas de estelas talladas en granito, destacando 3 de ellas: La 1ª que yace rota en el suelo, la 2º que fue devuelta por Italia en 2008, tras estar en Roma desde 1937 y la 3ª, que tiene 21 metros de altura y es probablemente la mas antigua.

    Damos un paseo por los alrededores pasando por otro campo de estelas, hasta llegar al Mai Shum, los baños de la Reina de Saba, donde decenas de etíopes se bañan desnudos. Regresamos hasta la Iglesia de Sta Maria de Sion, la mayor iglesia de Etiopía. Detrás de la iglesia antigua hay dos capillas, en una de ellas la leyenda dice que se guarda el Arca de la Alianza. Desistimos de ir a los restos del Palacio de la Reina de Saba y al otro campo de estelas (de Gudit) Volvemos hacia el hotel pasando por un descampado donde se encuentran varios tronos ceremoniales. En nuestra opinión, a no ser que vayas a realizar la ruta de las iglesias del Tigray, de esta parada se puede prescindir.

    Por la mañana el transfer no aparece a la hora prevista. El chico del hotel, amabilisimo, realiza varias llamadas hasta que finalmente llega el transporte. Iniciamos ruta y comentamos que tenemos concretado parar en un par de iglesias del camino. Tras varias conversaciones telefónicas y como, por lo visto, la agencia no le paga lo suficiente el chofer se da la vuelta y nos lleva a otro hotel para que nos cambien a otro vehículo.Este sí está dispuesto a hacer la ruta aunque también se pasaría medio viaje hablando por teléfono negociando el pago. Muy mal la gestión de ETT, aunque mucho peor seria la que realizarian en el Erta Ale.

    Es un viaje por unos bonitos paisajes montañosos de unas 4 horas de duración. Hacemos una parada en el pueblo de Megab para que el conductor coma. Nosotros llevamos frutas y galletas así que nos dedicamos a pasear rodeados de montones de niños.

    Seguimos por una carretera en obras hasta llegar a la única iglesia que finalmente vamos a visitar, la que creemos mas interesante y que no requiere el esfuerzo de las otras que se encuentran ubicadas en sitios de muy difícil acceso. Cuando llegamos a Abraha Atsbeha, situada en una roca de color rojo con vistas al valle y su fachada pintada de blanco, una de las mejores y más grandes iglesias además de una de las más antiguas del Tigray, tenemos la suerte de que están celebrando misa.
    Aunque esto nos impide recorrer su interior libremente, la mayor parte de pinturas (siglos XVII y XVIII) están en el pórtico, recogiendo magnificas escenas de la biblia, entre ellas un colorido San Jorge a caballo liquidando al consabido dragón.
    Aunque según el cartel de la puerta han aumentado el precio de la visita de 150 a 250 ETB, finalmente nos cobran 200.

    Seguimos los 15 kms que faltan a Wukro para desde allí llegar a Mekele, al hotel Atse Johanes, donde pretenden cobrarnos mas de lo recogido en la reserva con Booking, siendo necesario llamar a la gerente. Finalmente cobran lo estipulado (con tarjeta) y nos dan una amplia habitación. Salimos a dar un paseo ya de noche, pero como se va la luz en todo el pueblo, regresamos al hotel para cenar (rica sopa de cebolla) y retirarnos.


    Lalibela


    Hacemos un pobre desayuno, dejamos las maletas en el hotel, ya que tras el tour volveremos a él, nos recogen y trasladan a las oficinas de ETT. Allí hay varios 4x4 preparados. Pedimos que nos asignen a uno donde van una pareja de españoles (Julio y Victoria) e iniciamos ruta. Entramos en tierra Afar, hacemos una parada para ver el paisaje y hacer fotos con un grupo de niños, antes de parar para el almuerzo. Empieza a hacer calor: nos dirigimos hacia una zona (la depresion del Danakil) donde se pueden alcanzar hasta los 60º.
    Llegamos al campamento donde vamos a pasar la noche, cerca del lago Assal (Karum), dejamos los colchones y el coche de cocina y marchamos al lago que se encuentra a 116 mts bajo el nivel del mar, para caminar por su inmensa superficie de sal, ver las caravanas de camellos y darnos un baño en una poza de aguas cristalina al lado de un cañón de sal. Tras enjuagarnos someramente con agua dulce nos trasladamos para ver la puesta de sol y sus reflejos sobre la superficie salina.

    Volvemos al campamento para hacer la cena a la luz de las linternas e intentar dormir algo al aire libre sobre unas estructuras de madera y cuerda con colchones sin que la temperatura baje de los 32º en toda la noche.

    Al amanecer un breve desayuno antes de volver a los vehículos e ir al Dallol, unas increíbles formaciones de sulfuro, sal y azufre que brotan de las entrañas de la tierra. Los pequeños lagos de agua verde que brotan de la tierra y una sofocante temperatura hacen que este lugar sea uno de los paisajes más inhóspitos del planeta y con una de las temperaturas más altas del mundo.
    Estos cráteres están ubicados en una depresión a 50 metros por debajo del nivel del mar. La última erupción fue en 1926, en un espacio en el que ahora hay un cráter de 30 metros de ancho, rebosante de aguas salobres y fuentes termales llenas de minerales que muestran tonos amarillos, verdes y azul intenso.

    Acompañados por los vigilantes afares armados volvemos de la caminata sudorosos y sedientos.(a pesar de los 2 litros de agua por persona que llevábamos) sorprendidos de que no haya zonas delimitadas y que se pueda pisar por cualquier sitio con el peligro que supone y con la destrucción que se provoca en estas delicadas superficies.

    Mientras algunos de la caravana regresan a Mekele y otros vehículos prosiguen con una ruta de 3 días, nosotros iniciamos camino de regreso para conectar con la carretera que nos ha de llevar al volcán Erta Ale (Montaña Humeante en lenguaje afar).
    Paramos para almorzar en uno de los pocos pueblos de la ruta y antes de llegar al lago Adfera nos desviamos para hacer media hora de conducción sobre arena antes de llegar a la zona de volcán y hacer unos pocos kilómetros durante casi una hora entre coladas de lava. Llegamos al campamento Domdom (una guarrería de sitio, lleno de basuras y miles de botellas de plástico) desde donde, tras cargar los camellos con los colchones y agua y darnos de cenar iniciamos el ascenso nocturno. Son casi 12 Kilometros para un desnivel de mas de 400 mts, en que se tardan cuatro buenas horas.
    Entre el calor y la reciente cena empiezo a sentirme mal y tengo que parar. Cuando nos damos cuenta el grupo nos ha dejado atrás y Jorge y yo nos encontramos solos en mitad de ninguna parte.

    Empezamos a hacer señales con las linternas y al rato aparecen un par de afares que nos llevan hasta donde está el grupo. Como mi “pájara” continúa el guía de ETT me ofrece un camello por 700ETB, los afares se niegan a alquilarlo si es solo para la subida teniendo que ser para subir y bajar por 1100ETB. Lógicamente ya que no puedo con mi cuerpo, aceptamos.

    Cuando llegamos a la zona del cráter, yo me quedo tumbado sobre uno de los colchones mientras el resto del grupo se va a ver el lago de lava, volviendo totalmente desilusionados ya que no se ve nada y enfadados con el guía ya que éste dejó a parte del grupo abandonado a su suerte y tuvieron que volver casi por su cuenta con el peligro que esa situación supone. En la zona destinada a dormir llegan de vez en cuando las emanaciones sulfurosas del volcan dificultando la respiracion.

    Duermo profundamente, a pesar del ratón que corretea entre nosotros, hasta que a las 5 de la mañana nos despiertan para ver el amanecer en el borde del cráter. Me encuentro bastante mejor y me acerco con el grupo a NO ver nada ya que el humo lo cubre todo.
    La zona del volcan tambien está tremendamente sucia,llena de basura con cientos de plasticos y botellas

    A la hora de regresar los afares dicen que no tienen camello, el guía discute con ellos, yo insisto que prefiero bajar andando y finalmente después de un rato de descenso aparecen con un camello.
    El resto del viaje lo pasaré sin comer nada, tomando sorbitos de suero hidratante, ya que aun me quedan restos de la “pajara”


    Iglesia en Tigray


    Volvemos por las coladas y las arenas (los chinos están haciendo ahora una carretera hasta el volcán) para ir hasta las fuentes termales del lago Afrera a bañarnos. Almorzamos en el pueblo vecino antes de iniciar el camino hacia Abala y Mekele. A la llegada los de ETT, imagino que como disculpa por su mal funcionamiento, nos ofrecen el transfer gratis al aeropuerto para el día siguiente.
    Nos despedimos de Julio y Victoria, que han sido una muy agradable compañía en esta parte del viaje.

    Llegamos al hotel de vuelta y nueva discusión por pretender cobrar mas de lo estipulado con llamada a la gerente para pagar lo acordado. Esta vez la habitación asignada es mucho peor. Al dia siguiente nos retrasan el vuelo una hora, llegando a Adiss Abeba, una ciudad que se estima supera los seis millones de habitantes, a mas de las 2 y media y encima el transfer del hotel Adis Abeba Regency que supuestamente nos debe recoger no aparece aunque hemos avisado del retraso. Un transfer de otro hotel se ofrece llevarnos por 500 ETB. Nos parece caro pero aceptamos. A la llegada al hotel nos quejamos por el plantón e inmediatamente nos devuelven lo pagado por el traslado. El hotel está muy bien (a 53€ noche) y, como comprobaremos en la cena, en el restaurante se come magníficamente.

    Damos un paseo por los alrededores pasando por una mezquita de color azul y llegando hasta el hospital de Yekatit en la plaza de Siddist Kilo. Desde allí al día siguiente iniciaremos nuestra caminata para conocer un poco esta inmensa capital.
    En esta plaza se ubica un monumento a los etíopes asesinados por el virrey Graziani en el año 1937 y en sus cercanías está el zoo de leones de Addis, cuyo acceso no logramos encontrar. Seguimos por la calle de Jorge VI hasta llegar al Museo Nacional, que alberga una importante colección de arte aksumita, y diversas piezas de arte, aunque el esqueleto de Lucy, un Australopithecus afarensis de 3,2 millones de antigüedad es lo mas destacado de la colección. La entrada son 10 ETB que podrían destinar a contratar a alguien de mantenimiento, ya que el recinto esta algo deteriorado. Como aún es temprano no entramos en el vecino restaurante Lucy y seguimos hasta la iglesia de Sta Maria, donde se ubica la residencia del Patriarca de la Iglesia Etiope. Llegamos hasta Arat Kilo, plaza en la que se encuentra el León de Judá en conmemoración del retorno de Haile Selassie tras la ocupación italiana. Allí entramos en un super para comprar algo de té y especias.

    En lugar de marchar hacia la catedral de la Trinidad donde se encuentran las tumbas de Haile Selassie y su esposa, y al antiguo Ghebbi (Palacio Imperial) cerrado al público por ser la residencia del primer ministro, nos desviamos hacia la zona de Piassa ( donde aun permanecen diversas construcciones de comienzos del siglo XX de estilo colonial, y algunos edificios de estilo racionalista de la etapa de ocupación italiana) por las calles Adwa y Haile Selassie, la cual se encuentra repleta de joyerías. Paramos en una cafetería de diseño para refrescarnos con unos zumos y seguimos hasta que salimos a Edem Street, en las cercanías de la plaza del Emperador Menelik, y de la catedral de San Jorge.
    Bajamos por la Churchill Avenue hacia el centro moderno de la ciudad, rodeado de cantidad de vehiculos contaminantes que hacen que el aire sea casi irrespirable.

    En la zona de Tewodros square, un trío de chavales se aproximan y en un momento nos rodean, con la clara intención de robarnos, incluso uno de ellos alcanza a meter la mano en uno de los bolsillos de Jorge. Unos gritos y manotazos nos libran del asalto. Vamos a la zona del estadio (aquí otro grupito se nos acerca con las mismas intenciones aunque a estos los esquivamos a tiempo) con la intención de tomar una de las 2 lineas de metro, pero aparte de tardar vienen abarrotadas. Decidimos retirarnos ya que esta ciudad con cientos de edificios a medio construir, basuras amontonadas, aceras en mal estado y tan poco monumental nos parece lo menos interesante de todo el viaje.

    Volvemos a la zona del hotel en uno de los típicos taxis azules, el cual poco metros después de habernos bajado vemos en mitad de la avenida con el motor reventado. Almorzamos y cenamos en el hotel, preparando las maletas para la próxima etapa de nuestro viaje : Zanzibar

    Finalmente el viaje nos ha salido (incluyendo todo, excepto el upgrade), por 1800 € por cabeza


    Danakil
     

    mapa de la ruta